Unidades
CASTORES
De 7 a 9 años: Compartir.
Los castores son los más pequeños del grupo. Juegan y aprenden a compartir, ampliando su marco de relaciones del ámbito familiar al grupo de amigos.
LOBATOS
Entre 9 y 12 años: El Gran Juego
Poco a poco van descubriendo los valores a través del juego, los cuentos, la vida en comunidad y el contacto con la naturaleza, asumiendo nuevas responsabilidades para poder ayudar mejor a los demás.
RANGERS
De 12 a 15 años: La Aventura.
Los Rangers son la Unidad más antigua del Movimiento Scout. Se organizan en patrullas, donde cada uno asume responsabilidades concretas y el compromiso de colaborar con los demás. Su aventura es la exploración de uno mismo y del mundo que nos rodea a través de actividades realizadas en la naturaleza y el equipo.
PIONEROS
De 15 a 18 años: De la ilusión al compromiso.
El escultismo propone a los pioneros una actitud de vida basada en la participación, la confianza y la responsabilidad para construir un mundo más fraternal y más justo. Todos asumen el compromiso, todos preparan la acción, todos eligen, todos participan, todos tienen la palabra.
Durante todo el año hacen proyectos, elegidos por ellos, en los que aprenden a trabajar en equipo y financiarse sus propias actividades.
Funcionan como una pequeña sociedad democrática, que toma decisiones, legisla, consensúa y ejecuta los proyectos comunes, reflexionando sobre todos estos procesos de participación comunitaria. Los proyectos que llevan a cabo tienen una dimensión tanto personal como social, siendo necesario un equilibrio.
RUTAS
A partir de los 18 años: Vivir la ruta con los compañeros.
Recorrer la ruta es ser capaz de plantearse sus propias metas y encontrar los medios para solucionar los problemas que vayan surgiendo por el camino. Esto sirve de ayuda para incorporarse activamente en la sociedad como personas responsables y comprometidas, y llevar a la práctica los valores humanos y cristianos asimilados en la educación scout.
KRAAL
A partir de los 21 años: Acompañamiento adulto.
El Kraal es un equipo de trabajo formado por voluntarios que dedican su tiempo a la planificación y elaboración de actividades para crear un ambiente óptimo para el desarrollo personal en el entorno del movimiento scout. Los responsables tienen el cometido de educar mediante el ejemplo para que los chavales vivan los valores del escultismo de forma directa y significativa.